Por Eric Duport Jaramillo  2009-10-07

Este programa que fue acogido por cerca de 25 personas, que tienen vínculos con la madre patria o han regresado a su terruño, ahora tienen en sus manos herramientas claras para desarrollar su idea de negocio. 

Por ello quiero aprovechar estas líneas para agradecer a las instituciones que hicieron posible el desarrollo de este programa, pero además a quienes le apostaron a este modelo, que empieza a abrirles horizontes en materia empresarial. 

Y es que llena de satisfacción ver como ese grupo de emprendedores le dedicaron al programa su tiempo y, sobre todo, creyeron en esta herramienta como fundamento para el desarrollo de sus negocios en un futuro próximo. 

Si bien sabemos que las condiciones económicas y laborales de la ciudad no son las más alentadoras, por lo menos nos permite encontrar que entre nuestros ciudadanos aún permanece vivo el espíritu emprendedor de nuestras gentes. 

Esta es una respuesta a esa difícil situación por la cual han atravesado cientos de coterráneos quienes decidieron salir del país a buscar fortuna en otras latitudes.

Este programa incluyó la dirección del  proyecto empresarial, marketing, informática de gestión, aspectos jurídicos locales, trabajo de campo, finanzas y dirección del proyecto final. 

Cada persona tuvo una asesoría personalizada, durante los dos últimos meses, donde pudieron conocer los temas mencionados y dilucidar todas las dudas sobre su proyecto empresarial. 

El tema del retorno de los compatriotas al país empieza a tener una respuesta efectiva, y aunque seguramente la cobertura todavía es poca, este primer ejercicio nos dejará conocimiento para replicar y seguir generando opciones de capacitación para más interesados.