Por: Mauricio Vega Lemus

@MauricioVegaL

Las exportaciones de bienes y servicios del departamento de Risaralda atraviesan por una coyuntura bien difícil: en el acumulado enero-agosto de 2013 las exportaciones totales han caído un 23%, las cafeteras cayeron un 26%, mientras que las no tradicionales se contrajeron en un 16%.

Como se ha dicho en reiteradas ocasiones, esto implica que la demanda interna debe hacer un mayor esfuerzo para crecer el conjunto de la economía y así poder sostener el nivel de empleo, una de nuestras principales preocupaciones a la hora de las mediciones.

La importancia para una región del crecimiento de sus exportaciones tiene varias implicaciones: de un lado constituye un gran soporte para el crecimiento del PIB, y mejora la capacidad de generar eslabonamientos entre empresas grandes, medianas y micros.

Por otra parte, implica que las compras o importaciones se financian por las ventas, es decir, no se entra en déficit comercial, y por supuesto constituye un soporte al crecimiento del empleo y las finanzas de la región.

En ese orden de ideas, resulta fundamental la tarea de aumentar nuestras exportaciones. Latente tenemos el ejemplo de España, donde gracias a un repunte en las exportaciones, esta semana se anunciaba el anhelado fin de más de 3 años de recesión económica.

Para que este cambio se produzca, se requiere un esfuerzo conjunto, no solo de los empresarios, sino del gobierno en todos sus niveles, empezando por lo básico: salir a vender los bienes y servicios generados en el territorio, a través de ferias, ruedas de negocios y demás, de manera recurrente. Aquí es clave el apoyo del sector público, desde distintos frentes para financiar este tipo de iniciativas, lo que hará posible tener una economía y una población dinámica y evolucionando en las distintas áreas sociales.

Jalonar entonces nuevamente las exportaciones, el crecimiento económico y el empleo, es una responsabilidad de todos, para lo cual se hace evidente generar un acuerdo social, público-privado, complementario a la estrategia que se tiene con la agencia de promoción de inversiones de Risaralda, Invest In Pereira.

Por eso hay que destacar eventos como Eje Exporta, que son de la mayor importancia y pertinencia, por su agenda académica pero además como oportunidad para los empresarios locales que pueden aprovechar esta plataforma comercial, que busca garantizar la sostenibilidad de mercado para los bienes y servicios locales en el corto y largo plazo.

AL FINAL. Lamentable desenlace de los inconvenientes en la Universidad Tecnológica de Pereira. Que se hayan visto obligados a cancelar el semestre es una mala noticia para todos, empezando por los mismos estudiantes, que en su inmensa mayoría deben ser ajenos a las posiciones radicales de algunos de sus voceros. Ya va siendo hora que las verdaderas mayorías estudiantiles se hagan sentir y hagan respetar a toda costa su más elemental derecho: el de acceder a una educación oportuna y de calidad.