Columna de opinión de Mauricio Vega Lemus

Publicada en periódico El Diario el lunes 11 de junio de 2018

Después del terremoto de 1.999, en Pereira vivimos con la zozobra constante llamada Colector Egoyá, una quebrada que se canalizó desde los años ´30, que mantiene en vilo a los habitantes, comerciantes y transeúntes en la zona céntrica, porque la estructura de uno de sus tramos esta tan debilitada que se constituye en un factor de riesgo extremo.  

Ante las circunstancias y la urgencia de actuar, desde la Alcaldía de Pereira y la empresa Aguas y Aguas se anunció días atrás la intervención, esperada por la ciudadanía, de este colector, en especial del tramo comprendido entre la calle 16 y la 22 sobre la carrera 12, el de mayor vulnerabilidad. El colector atraviesa la ciudad en los ejes de la Avenida Circunvalar, 30 de agosto y la carrera octava. 

Este "cascarón" en el tramo particularmente identificado, presenta un nivel de deterioro elevado, por lo cual ha sido catalogado con riesgo inminente de colapso y de llegar a ceder, afectaría, según el diagnóstico realizado por Aguas y Aguas, a 32.166 habitantes, 4.356 establecimientos comerciales, 101 centros industriales y 55 entes oficiales.  

De manera responsable la junta directiva de Aguas y Aguas dio prioridad a la atención de esta amenaza y con el liderazgo de su gerente Francisco Valencia, ya inician las obras con la construcción del "Nuevo Egoyá", con el que se ha prometido a Pereira que en 18 meses la amenaza será historia. El tramo más debilitado será clausurado.  

El Nuevo Egoyá, que tendrá una longitud de 650 metros, desviará el colector en la calle 16 para conectarlo nuevamente en la calle 22, con un costo de 21.534 millones de pesos, una cifra menor a la del impacto económico que implicaría un desastre de Egoyá, estimado en 150 mil millones de pesos, casi siete veces mas de lo que cuesta esta solución.  

Los recursos provienen de un crédito que asume la empresa Aguas y Aguas con la Financiera de Desarrollo Territorial Findeter, un esfuerzo que se traducirá en beneficio físico y económico para la ciudad.  

Pero adicional a estas obras con las que se supera la amenaza de Egoyá en pleno centro de Pereira, la Alcaldía anunció la construcción de la avenida San Jerónimo, que recorrerá la carrera 12 entre calles 16 a la 26, con tres carriles vehiculares, uno de ellos exclusivo para el sistema de transporte público, para contar con un nuevo conector vial Oriente-Occidente.  

Se percibe optimismo por las obras anunciadas y especialmente, seguridad y confianza por lograr superar una amenaza latente para nuestra ciudad. Es ahora o nunca.