La Primera Semana del Caballo, organizada por la Federación Equina, Fedequinas y Crines es una clara demostración del potencial que tiene la ciudad para atraer eventos de calidad y al que concurran muchas personas.

Durante una semana, en distintos escenarios de la ciudad y entre eventos académicos y de exposiciones, los aficionados a los caballos tuvieron la mejor disculpa para estar en nuestra capital.

Hablando con algunos de los organizadores, las cifras de personas movilizadas hacia Pereira durante la semana del evento supera las 10 mil, entre las cuales, al menos 100 son internacionales.

Desde hace rato que con el liderazgo de Crines, Pereira se ha convertido en uno de los epicentros más importantes del país en esta materia y donde se realizan los eventos con mayor asistencia de ejemplares.

El promedio nacional en otros eventos no supera los 500 equinos mientras que hasta Pereira llegan más de 750 ejemplares a las exposiciones y de acuerdo con los organizadores ese atractivo que tiene la ciudad está dado en dos ventajas comparativas, la situación geográfica de la ciudad y una infraestructura altamente reconocida por los caballistas, la pista del Coliseo de Ferias y Exposiciones de Cerritos.

Este evento ha irrigado una importante cantidad de recursos en los hoteles, transporte público, restaurantes, almacenes agropecuarios, entre otros, y sigue posicionando a Pereira como uno de los escenarios preferidos por este gremio, que ya se había volcado hasta la ciudad en el 2005 a un evento como el de hoy o a la Mundial Equina de 2009.

Creo que la Semana del Caballo con el movimiento de gente y de la economía son un claro ejemplo de lo que hemos venido insistiendo permanentemente en todos los escenarios: hay que apostarle al turismo de eventos.

Ya nos lo está demostrando Medellín, que se reinventó la forma de hacer turismo a punta de eventos grandiosos: Juegos Suramericanos, Cumbre de las Américas, concierto de Madonna y ahora está postulada para los Juegos Olímpicos de la Juventud.

Ahí está la importancia de mejorar al máximo nuestra infraestructura aeroportuaria y ferial para tener el case inicial y atraer los grandes eventos. El otro paso es creer que somos capaces de hacer ferias, exposiciones y convenciones como lo están haciendo los caballistas.